La ley es solo una “sombra”, de lo que iba a ser la verdad, en Cristo.
La palabra dice en:
Hebreos 10:1
Porque la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente cada año, hacer perfectos a los que se acercan.
Este versículo nos muestra que la ley dada a Moisés para el pueblo de Israel, con sus sacrificios y rituales, era solo una sombra de lo que estaba por venir en Cristo.
Por ejemplo, el cordero que se sacrificaba no quitaba el pecado, este sacrificio lo hacían cada año, este rito es la sombra.
Ahora vamos a ver la verdad, en:
Juan 1:29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo
Juan el Bautista identifica a Jesús como el cordero y hace énfasis que quita el pecado, esto sucedería al entregarse por nosotros, oramos para que Dios alumbre nuestro entendimiento, al leer:
Hebreos 9:26
26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.
Este versículo nos comparte la verdad, Jesús, el verdadero cordero, hizo una vez y para siempre el verdadero sacrificio y quito el pecado.
Ahora vamos a:
Colosenses 2:16-17
Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o sábados; todo lo cual es sombra de lo que ha de venir, pero el cuerpo es de Cristo.
La palabra muestra como las prácticas del Antiguo pacto, como los días festivos y las leyes sobre lo que se puede comer, son “sombras” de lo que finalmente se cumpliría en Cristo, que es la verdad.
La ley es la “sombra”, es decir, refleja la verdad que se revelaría plenamente con la venida de Cristo.
Debemos orar unos por otros y animarnos para que todos estemos en un estudio bíblico, para salir de la sombra y vivir en la verdad,
Jesús dijo conoceréis la verdad y la verdad os hará libres
Para finalizar vamos a
Mateo 6:6
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará en público.