Vamos a leer el versículo
La reconvención es molesta al que deja el camino; y el que aborrece la corrección morirá.
Este versículo nos muestra dos errores
Rechazar y aborrecer la corrección.
EL versículo hace referencia a
“dejar el camino”,
Surge una pregunta
¿Cuál camino se dejó?
La respuesta la encontramos en:
Juan 14:6
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida;
Y en juan 1:17 dice que por medio de Jesucristo vino la Gracia y la verdad, es decir, El camino es ,el evangelio de la gracia de Dios
El versículo señala la reconvención se vuelve molesta para aquellos que han abandonado este camino.
Cuando una persona se aleja de la verdad , que le fue revelada, cualquier intento dirección les resulta incómodo.
En otras palabras, cuando alguien actuar de forma equivocada, incluso el consejo más amoroso y bien intencionado puede sentirse como una afrenta.
Surge una pregunta
¿Cuántas veces hemos sentido que la reconvención o los consejos nos molestan?
La segunda parte de este versículo es aún más contundente. dice:
“el que aborrece la corrección morirá.”
La “muerte” aquí no se refiere a la muerte física, sino a una muerte en el alma, producida por los deseos engañosos, por ejemplo, envidia, codicia, avaricia, contienda, celos, pleitos, idolatría, etc estos no permiten que disfrutemos del reino de Dios aquí en la tierra.
Uno de los síntomas de la persona altiva es: Rechazar la corrección.
Vamos a ver que dice Dios sobre la altivez en:
Proverbios 16:5
5 Abominación es a Jehová todo altivo de corazón;
La corrección es una muestra de amor. Dios, como nuestro Padre celestial, nos corrige porque nos ama y desea nuestro bienestar.
La corrección evita caer en los engaños y nos guía por su camino.
Si rechazamos la corrección, nos exponemos a las consecuencias de nuestras malas decisiones, que finalmente nos lleva a una vida de desdicha y dolor
Oramos para ver claramente que somos necesitados de Dios.
Para finalizar vamos a
Mateo 6:6
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará en público.