Estamos en el primer mes del año con expectativas y muchas metas por alcanzar para la gloria de Dios.
Algunas parecen que fueran imposibles de alcanzar
y podemos caer en el error de abandonar,
sin ni siquiera haber iniciado.
¡¡¡ALTO!!! NO DEBEMOS RENUNCIAR,
Dios nos llamó para disfrutar de su reino aquí en la tierra, debemos estar a la expectativa,
que suceda el milagro.
En la biblia encontramos milagros
en todas las áreas de la vida.
Por ejemplo, en Zaqueo, el milagro de trasformación de maneras de vivir.
Milagros de sanidad, uno de estos fue la mujer enferma con flujo de sangre.
Es sencillo, Solo debemos creer.
Esto se ve claramente en el milagro de la resurrección de la hija de Jairo, Jesús le dijo: “no temas, solamente cree” Y también se ve claramente en el siguiente milagro, el cual lo encontramos en
Mateo 9:27-28
Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo !Ten misericordia de nosotros, Hijo de David! Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.
En el versículo 28 se hace énfasis, “en creer” .
Jesús pregunta si creen que sea posible el milagro.
Dios no cambia es el mismo, revisemos las diferentes situaciones y metas que tenemos y respondamos:
¿Creemos que es posible un milagro?
Al continuar la historia en Mateo 9:29-30
Entonces les tocó los ojos, diciendo:
Conforme a vuestra fe os sea hecho.
Y los ojos de ellos fueron abiertos.
Sucedió el milagro.
Familia de la fe, sucederá el milagro de sanidad, de trasformación de vida, en el trabajo.
El milagro en la economía, en la familia.
No podemos dudar, SUCEDERÁ EL MILAGRO por el poder de Dios para su Gloria.
Así que, avancemos teniendo presente lo que dice en
1 Corintios 13:13
Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.