Vamos a
Romanos 12:12
Gozaos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración.
La vida cristiana no está exenta de dificultades.
Jesús mismo dijo en Juan 16:33 que en el mundo tendríamos aflicción. Sin embargo, nos dejó una promesa:
“Él ha vencido al mundo”.
En tiempos de adversidad, mantener la esperanza es por fe.
Por medio de la Palabra de Dios y nuestra relación con Él, podemos mantener la esperanza firme incluso en las circunstancias más difíciles.
- Gozaos en la Esperanza:
La esperanza cristiana no es un mero deseo o ilusión, sino una expectativa confiada basada en las promesas de Dios.
En Romanos 8:24-25 nos dice que fuimos salvados en esperanza.
Esta esperanza no se basa en lo que vemos, sino en las promesas de Dios, es por fe, Dios no miente.
- Sufridos en la Tribulación:
Pablo nos exhorta a ser pacientes en la tribulación.
La paciencia aquí implica una resistencia activa, una perseverancia en medio de las pruebas. En Santiago 1:2-4 nos anima a tener gozo en las pruebas, porque producen paciencia y, a través de esta paciencia, somos perfeccionados.
En lugar de permitir que las tribulaciones nos derroten, debemos verlas como oportunidades para crecer y fortalecernos en nuestra fe.
Dios usa la adversidad para moldearnos y prepararnos para Su propósito.
- Constantes en la Oración:
La oración es nuestra línea directa con Dios.
Es en la comunión con Él donde encontramos la fuerza y el consuelo necesarios para mantenernos firmes en la esperanza.
En Filipenses 4:6-7 nos instruye a no estar ansiosos por nada, sino a presentar nuestras peticiones a Dios en oración.
Y La paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará nuestros corazones y nuestras mentes en Cristo Jesús.
La constancia en la oración nos permite descargar nuestras preocupaciones en Dios y recibir Su paz y guía.
Veamos algunos ejemplos de Esperanza en la Adversidad:
Job
A pesar de perderlo todo, Job mantuvo su esperanza en Dios.
Job en el capítulo 19:25
dijo: “Yo sé que mi Redentor vive” , muestra una fe inquebrantable en medio de la adversidad.
– David: En muchos de sus salmos, expresa su angustia, pero siempre retorna a la esperanza en Dios.
El Salmo 42:11 es un ejemplo: ¿Por qué te abates, alma mía, y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, salvación mía y Dios mío.
– Pablo:
En sus cartas, Pablo a menudo habla de sus sufrimientos, pero siempre con una perspectiva de esperanza.
En 2 Corintios 4:8-9, dice: “Estamos atribulados en todo, pero no angustiados; en apuros, pero no desesperados; perseguidos, pero no desamparados; derribados, pero no destruidos.”
Mantener la esperanza en la adversidad no es fácil, pero es posible a través de la relación personal con Dios.
Oramos para que nuestra esperanza este solo anclada en las promesas de Dios, que son fieles y verdaderas.
Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13: 13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor