2 Pedro 1:3-4
3 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos
llamó por su gloria y excelencia,
4 por medio de las cuales nos ha dado
preciosas y grandísimas promesas,
para que por ellas llegaseis
a ser participantes de la naturaleza divina,
habiendo huido de la corrupción que
hay en el mundo a causa de la concupiscencia;
Las características humanas son buenas,
pero son limitadas, fallan constantemente
y tienden a ser egoístas.
Hay una gran diferencia entre justicia o amor humano,
a la justicia y el amor de Dios y cuando hablamos
de naturaleza nos referimos a la esencia
o característica propia de Dios.
La palabra dice que Dios nos dio grandísimas
promesas por su palabra, esta no cambia
y permanece para siempre.
Las promesas de Dios dependen del poder de Dios,
no de las situaciones o circunstancias externas,
así que en este tiempo de adversidad
sus promesas se cumplen, es por fe.
Dios nos llamo a participar de su esencia
aquí en la tierra.
Gálatas 5:24-25
24 Pero los que son de Cristo han crucificado
la carne con sus pasiones y deseos.
25 Si vivimos por el Espíritu, andemos
también por el Espíritu.
Dios nos ha llamado para conocer la verdad
y de esta forma manifestar el fruto del Espíritu,
su Naturaleza aquí en la tierra para una vida sobrenatural por el poder de Dios
Para finalizar recordemos lo que dice en,
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.