La historia del sacerdote Zacarías y su esposa
Elizabeth la encontramos en Lucas 1: 5-20.
Zacarías era temeroso de Dios, servía en el templo
y oraba a Dios para poder tener un hijo.
La situación natural de esta pareja,
tenía mucha similitud a la de Abraham y Sara.
Zacarías y Elizabeth eran de edad avanzada
y Elizabeth era estéril, por lo que bajo
estas condiciones era imposible concebir.
Un día se le apareció un ángel mientras Zacarías
hacia el rito y le dijo que su oración había
sido contestada e iba a tener un hijo
a lo que Zacarías respondió:
¿En qué conoceré esto?
Porque yo soy viejo,
y mi mujer es de edad avanzada.
Zacarías dudo de la promesa de Dios,
Pero ¿porque Zacarías dudo?
Él estaba viviendo por vista, y olvido que Dios es el Todopoderoso y sus promesas su cumplen.
Nosotros siempre debemos tener presente las promesas de Dios y reconocer que su palabra es la verdad,
por lo tanto, se cumple independiente
de las circunstancias.
La relación personal con Dios nos permite vivir por fe, sostenidos por su palabra.
Regresando a la historia del sacerdote Zacarías,
el ángel le dijo” como no creíste quedas mudo hasta que el niño nazca y todo se cumplió conforme a la palabra de Dios” Y su hijo Juan el bautista.
Recordemos que Dios no miente
y nada limita su palabra.
Debemos tener en cuenta, la duda va aparecer por que la genera el entorno y el engaño de la carne,
por esto Pablo identifica a la fe como un escudo
que va a proteger nuestra alma de la duda.
Para finalizar recordemos lo que dice en:
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.