Dios hablo en varias ocasiones con Abraham,
por ejemplo, la primera vez fue cuando tenía 75 años, pero vamos a referirnos cuando Abraham tenía 99 años.
Para eso leamos Génesis 17:1
Era Abram de edad de noventa y nueve años,
cuando le apareció Jehová y le dijo:
Yo soy el Dios Todopoderoso;
anda delante de mí y sé perfecto.
Ya han pasado 25 años desde la primera vez que lo llamó, y estaba pendiente la promesa del hijo,
y aunque en lo natural era imposible que se cumpliera la promesa, Dios le dice “Yo soy el Dios Todopoderoso”.
Dios nos llamó y conocemos sus promesas,
y aunque pase el tiempo, y no veamos una respuesta clara, recordemos que Dios es Todopoderoso,
y todo es a su tiempo no al nuestro,
por eso no debemos desmayar en nuestra
relación personal con Dios.
Regresando a la historia dice en Génesis 17:17
17 Entonces Abraham se postró sobre su rostro,
y se rió, y dijo en su corazón:
¿A hombre de cien años ha de nacer hijo?
¿Y Sara, ya de noventa años, ha de concebir?
Abraham pensó en su situación y empezó a
cuestionar como eso sería posible, pero al continuar la historia Dios le dice en Génesis 17:19
19 Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo,
y llamarás su nombre Isaac;
A veces nos podemos cuestionar porque no sale todo como queremos, o porque nos pasan ciertas cosas,
sin embargo, debemos recordar que Dios es Todopoderoso y sus promesas se cumplen, por eso nosotros veremos los milagros y disfrutaremos de sus promesas; porque en
Génesis 18:14 dice
14 ¿Hay para Dios alguna cosa difícil?
Al tiempo señalado volveré a ti,
y según el tiempo de la vida,
Sara tendrá un hijo.
Para Dios no hay nada difícil, así que avancemos por fe.
Para finalizar recordemos lo que dice en
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.