La oración hace parte de nuestra relación
personal con Dios, por eso debemos tener
en cuenta lo que dice Colosenses 4:2
Perseverad en la oración,
velando en ella con acción de gracias.
La palabra dice que nos podemos acercar confiadamente al trono de la gracia para hablar
con él, por esta razón debemos aplicar
cuando oremos lo que dice en Mateo 6:7
Y orando, no uséis vanas repeticiones,
como los gentiles, que piensan que por
su palabrería serán oídos.
También debemos incluir en nuestras oraciones
lo que dice en 1 Pedro 5:7
7 echando toda vuestra ansiedad sobre él,
porque él tiene cuidado de vosotros.
Filipenses 4:6
6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
El tiempo de oración nos permite vivir descansados confiando plenamente el cuidado de Dios.
Pero también debemos pedir como está escrito en Jeremías 33:3
Clama a mí, y yo te responderé,
y te enseñaré cosas grandes y
ocultas que tú no conoces.
Santiago1:6
Pero pida con fe, no dudando nada;
porque el que duda es semejante a la onda
del mar, que es arrastrada por el viento
y echada de una parte a otra.
Teniendo la certeza de que Dios nos escucha.
1 Juan 5:14-15
14 Y esta es la confianza que tenemos en él,
que si pedimos alguna cosa conforme
a su voluntad, él nos oye.
15 Y si sabemos que él nos oye en cualquiera
cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho
Al finalizar la oración debemos tener en
cuenta lo que dice en:
Efesios 3:20
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas
las cosas mucho más abundantemente
de lo que pedimos o entendemos,
según el poder que actúa en nosotros