Acercarnos significa disminuir la distancia
entre una cosa o persona y otra, en este caso nos vamos a referir al concepto que podemos tener de Dios, es decir, pensar que Dios es distante,
lejano y ajeno a las necesidades.
También llega el pensamiento que no podemos acercarnos a Dios porque no nos escucha, porque creemos que estamos en pecado y separado de él.
La palabra dice que estamos revestidos de Cristo y podemos acercarnos a hablar
libremente no por nuestras obras o penitencias
sino por lo que él hizo, vamos a Efesios 2:13
Pero ahora en Cristo Jesús,
vosotros que en otro tiempo estabais lejos,
habéis sido hechos cercanos
por la sangre de Cristo.
Gracias a su sacrificio nos hizo cercanos a él,
Dios no juzga, ni condena, la palabra también
dice que nada nos puede separar del amor de Dios.
No debemos tener temor, ni vergüenza de hablar con Dios, todo lo contrario debemos hacer
lo que dice en Hebreos 4:16
Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar
gracia para el oportuno socorro.
Cada día debemos vivir confiadamente y acercarnos, es decir, orar y leer su palabra, pedir dirección para tomar las decisiones correctas.
Para finalizar vamos a la siguiente promesa
de Dios para nuestra vida en Efesios 3:20
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas
las cosas mucho más abundantemente
de lo que pedimos o entendemos,
según el poder que actúa en nosotros