Vamos ver dos definiciones de paciencia
La primera es la Calma o tranquilidad para esperar.
La espera puede ser por ejemplo en un trancón
en el trafico o esperar que el tratamiento
de una enfermedad de resultado.
La segunda definición es: la actitud que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos
y dificultades para conseguir algún bien.
En La paciencia está inherente
el esperar tranquilos y calmados.
La paciencia generada por la voluntad humana
tiene un límite, en algún momento se puede quebrar. Por esta razón aparecen frase como:
“se me agoto la paciencia”, “Mi paciencia tiene un límite” o “no tengo paciencia”
En lo natural lo anterior es normal,
pero Dios nos llamo a conocer la verdad para
disfrutar de su reino aquí en la tierra.
En la palabra encontramos la paciencia, vamos a Romanos 15:5 Pero el Dios de la paciencia
Dios es la fuente de la paciencia inagotable
y nos ha llamado para disfrutar de ella, por medio de
la relación personal con él, por esto en la carta que
escribió Pablo a los Gálatas en capitulo 5 versículo 22 dice que la paciencia es un fruto del Espíritu.
Pedimos a Dios poder disfrutar del fruto de la paciencia porque es necesaria para alcanzar
las promesas, como el ejemplo de Abraham,
vamos a Hebreos 6:15
Y habiendo esperado con paciencia,
alcanzó la promesa.
Recordemos para Dios no hay nada imposible,
así que podemos estar seguros que gracias a
nuestra relación personal con el vamos a disfrutar
del fruto de la paciencia
Para finalizar vamos a 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él,
que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye, Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho