Efesios 5: 15
15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis,
no como necios sino como sabios,
El versículo nos dice que debemos estar revisando nuestro comportamiento, Por ejemplo
¿Cuál es el comportamiento en el hogar?
El versículo nos da dos opciones para validar el comportamiento, si es necio o sabio.
Salomón era un joven cuando le pidió a Dios
Sabiduría para gobernar el pueblo. La sabiduría de Dios no tiene nada que ver con la edad, estructura académica o experiencia dada por los años.
Vamos a Proverbios 2:6
Porque el Señor da la sabiduría,
Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.
El Señor vive en cada uno de nosotros y
el es la fuente de la sabiduría. Como sucede con el fruto del Espíritu es necesario ser dependientes
de Dios para que se manifieste.
La sabiduría de Dios es necesaria para manejar las diferentes circunstancias que se presentan en el hogar y en los diferentes roles que
desempeñamos de manera correcta .
Debemos incluir en nuestras oraciones la siguiente petición que encontramos en Santiago 5: 5
Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría pídala a Dios el cual da a todos abundantemente y sin reproche y le será dada
La petición es sabiduría. Oramos para vivir con la sabiduría que da Dios.
Para finalizar vamos a 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él,
que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho