En la biblia encontramos diferentes símbolos
para hablar de lo espiritual.
Un ejemplo es el agua, vamos a Juan 7:37-39
37 En el último y gran día de la fiesta,
Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo:
Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
38 El que cree en mí, como dice la Escritura,
de su interior correrán ríos de agua viva.
39 Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado.
Jesús está hablando de lo que iba a suceder cuando el resucitará, que su presencia iba a estar en cada uno de sus escogidos y para referirse a su presencia usa el símbolo del agua viva, también lo encontramos cuando Jesús habla con la mujer samaritana en Juan 4:10-11
10 Respondió Jesús y le dijo:
Si conocieras el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber; tú le pedirías,
y él te daría agua viva.
11 La mujer le dijo: Señor,
no tienes con qué sacarla,
y el pozo es hondo.
¿De dónde, pues, tienes el agua viva?
Al continuar en el 13 al 14 del mismo capítulo dice:
13 Respondió Jesús y le dijo:
Cualquiera que bebiere de esta agua,
volverá a tener sed;
14 mas el que bebiere del agua que yo le daré,
no tendrá sed jamás; sino que el agua que
yo le daré será en él una fuente de agua
que salte para vida eterna.
Nuestra relación personal con Dios
nos permite disfrutar de esa agua viva que sacia.
En medio de la adversidad la palabra de
Dios nos genera vida por ejemplo dice
– Da fuerza al cansado
– Multiplica las fuerzas al que no tiene ninguna
Pero cuando la situación es difícil o esta presenta la adversidad nos dice:
– Para los que aman a Dios todo obra para bien
– Echemos las angustias en Dios porque tiene
cuidado de nosotros
-Por nada debemos afanarnos sino sean conocidas las peticiones en oración con acción de gracias
– No te dejare ,ni te desamparare
Su palabra es agua para nuestra alma
y solo esta agua puede saciarla.
Oramos para cada día disfrutar del agua viva.
Para finalizar recordemos lo que dice en:
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios
y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.