El rey David expresa en varios salmos que
su confianza esta puesta en el Dios vivo, esto le permite vivir seguro y tranquilo en medio de la adversidad porque sabe que Dios le da la victoria.
Estamos viviendo tiempos de incertidumbre
y podemos caer en el temor.
Nuestra confianza debe estar en el Dios vivo como lo expresa el rey David en el Salmos 91:2-6
Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
Él te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.
Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
El salmo 91 es un canto a la confianza en Dios en medio de la adversidad, gracias a su poder
nos lleva en victoria, avanzando al versículo 7 dice
Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.
Su protección y cuidado siempre estará,
como dice en Salmos 91:10-12
10 No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.
11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.
12 En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.
Esto también el rey David lo expreso en el salmo 23 “aunque ande en valle de muerte
no temeré mal alguno”
Y al finalizar el salmo 91 entrega una promesa a sus escogidos en el versículo 16
16 Lo saciaré de larga vida,
Y le mostraré mi salvación.
Para finalizar vamos a la siguiente promesa de Dios para nuestra vida en Efesios 3:20
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas
las cosas mucho más abundantemente
de lo que pedimos o entendemos,
según el poder que actúa en nosotros