Vamos a
Colosenses 1:6
Que ha llegado a vosotros, como también en todo el mundo está dando fruto y creciendo, tal como también en vosotros, desde el día en que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad.
Al leer el versículo nos podemos preguntar:
¿Qué significa conocer la gracia de Dios en verdad?
¿Cómo cambia esta gracia nuestras vidas?
Pablo dice que la gracia de Dios está “dando fruto y creciendo”. La gracia no es algo que se recibe pasivamente; tiene un efecto transformador.
La verdadera gracia de Dios cambia nuestras vidas y produce fruto.
Esto incluye frutos como el amor, la paz, la paciencia, la bondad y la humildad.
La gracia de Dios en verdad, nos lleva a vivir de manera diferente, llegar a reflejar el carácter de Cristo en todo lo que hacemos.
El conocimiento de la gracia de Dios no es solo algo intelectual; es una experiencia personal. No basta con saber doctrinas acerca de la gracia, sino que Dios la revela para trasformar nuestro comportamiento.
Conocer la gracia de Dios en verdad es un proceso continuo de crecimiento en nuestra relación con Él.
Cuando entendemos lo que Cristo ha hecho por nosotros, nos impulsa a vivir de manera diferente, a compartir esa gracia con otros, a vivir en obediencia y gratitud.
La gracia de Dios nos lleva a hacer el bien, a vivir de manera justa, a ser instrumentos de paz y amor .
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Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13:13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor