En la palabra dice en 1 Corintios 14:33
33 pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz.
Dios nos ha llamado para que disfrutemos de su presencia que está en cada uno de nosotros.
De su presencia no emana confusión, ni engaño,
todo lo contrario, nos da su paz y nos revela
la verdad del evangelio para vivir libres.
Jesús dijo en Juan 16:33
33 Estas cosas os he hablado
para que en mí tengáis paz.
Los deseos de la carne hacen todo lo opuesto; perturban, alteran y engañan. Pero el fruto de
la paz es el resultado de la relación
personal diaria con Dios.
Esta paz generada por Dios sobrepasa todo entendimiento porque no la afecta nada y es independiente del entorno, hasta llegar al punto que disfrutamos de la siguiente promesa.
Colosenses 3:15
15 Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones,
Oramos al Dios vivo para que todos lleguemos a disfrutar de su paz aquí en la tierra
Para finalizar vamos a la siguiente promesa
de Dios para nuestra vida en Efesios 3:20
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas
las cosas mucho más abundantemente
de lo que pedimos o entendemos,
según el poder que actúa en nosotros