Dios nos llamo para disfrutar de su reino aquí en la tierra, una vida de gozo y paz generada por él.
En el área de la economía personal y familiar
hay promesas en la Biblia, por ejemplo la que encontramos en Malaquías 3:10
Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto,
dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré
las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
Reprenderé también por vosotros al devorador,
En el versículo Dios nos hace la siguiente
invitación “apartar y dar el diezmo”, al hacerlo
Dios nos dice que “Abrirá las ventanas de los cielos
y derramaré sobre nosotros bendiciones hasta que sobreabunde y nos guardar del devorador”
Es suficiente con la promesa de Dios
para nosotros por fe hacerlo, pero Dios
en el versículo diez nos invita a que lo probemos,
es decir, ver si Dios cumple su palabra o no.
Familia de la fe Dios no miente, es una acción de fe.
Lo que va a suceder en la vida de las personas
que apartan y dan el diezmo es que
disfrutan de la promesa que está en
el versículo 10 y 11 de Malaquías 3:10.
Para finalizar vamos a la siguiente promesa
de Dios para nuestra vida en 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él,
que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.
Y si sabemos que él nos oye en
cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.