El rey David en el salmo 121 expresa que confía plenamente en la protección dada por Dios.
Inicia preguntándose así mismo en el versículo 1; “Alzaré mis ojos a los montes;
¿De dónde vendrá mi socorro?
Y la respuesta la encontramos en el versículo 2
Mi socorro viene de Jehová,
Que hizo los cielos y la tierra.
Y la certeza que tenía el rey David que Dios lo podía hacer es porque es el único creador de Todo, es el Todopoderoso.
Al continuar los versículos siguientes dice:
No dará tu pie al resbaladero,
Ni se dormirá el que te guarda.
He aquí, no se adormecerá ni dormirá
El que guarda a Israel.
Jehová es tu guardador;
Jehová es tu sombra a tu mano derecha.
El rey David dice que Dios no se duerme ni se adormece, por eso nos guarda y protege como continua en los versículo 7 y 8, que dicen:
Jehová te guardará de todo mal;
Él guardará tu alma.
Jehová guardará tu salida y tu entrada
Desde ahora y para siempre.
Oramos para vivir con la certeza que es el Todopoderoso y único creador, podemos descansar en el sabiendo que es Fiel,
no miente y su palabra se cumple.
Debemos acudir siempre a Dios,
porque siempre hay Esperanza.
Para finalizar vamos a 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho