En lo natural se llama aguijón al órgano del cuerpo afilado presente en varios animales que normalmente expulsan algún tipo de veneno o picadura.
Teniendo en mente esta definición, vamos a la 2 carta a los Corintios capítulo 12 versículo 7 que Pablo dice:
me fue dado un aguijón en mi carne,
Pablo identifica las obras de la carne como un aguijón, es decir que expulsa veneno.
Las obras de la carne están identificadas en
Gálatas 5:19-21
Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas;
Para Pablo la fornicación no era un aguijón,
vamos a 1 Corintios 7:7
Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo; pero cada uno tiene su propio don de Dios, uno a la verdad de un modo, y otro de otro.
Pablo tenía el don de Continencia,
la fornicación no le afectaba, haciendo el símil con el aguijón no genera veneno que produce muerte en el alma, por esto seguido dice en 1 Corintios 7:9
pero si no tienen don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando.
Pero otras obras de la carne eran como un aguijón que afectaba su comportamiento,
por esta razón le pidió a Dios lo siguiente,
vamos a 2 Corintios 12:8
respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí.
La respuesta de Dios la encontramos
en 2 Corintios 12:9
Y me ha dicho:
Bástate mi gracia; porque mi poder se
perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades,
para que repose sobre mí el poder de Cristo.
La respuesta del Señor fue: “Bástate mi gracia”
La única manera para vivir en victoria sobre las debilidades, es la gracia de Dios.
No se necesita nada más,
por esto dice en Romanos 6:14
Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.
Dios nos llamó para vivir en victoria,
por medio de su poder.
Es necesaria la relación personal cada día con el Señor,el haciendo en nosotros,
vamos a 2 Corintios 12:14
…porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Su gracia es suficiente, es por fe.
Para finalizar vamos a 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho