Debemos orar por sabiduría para la administración del tiempo.
Estamos próximos a iniciar el segundo mes del año y Dios nos llamó a prosperar en todas las áreas de la vida, por ejemplo en el alma, la salud, la familia, el trabajo, los negocios etc, para esto es vital como administramos el tiempo.
Para esto vamos a compartir tres versículos sobre este tema
- Eclesiastés 3:1
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Este versículo nos dice que cada cosa tiene un momento adecuado para hacerlo.
El manejo del tiempo no solo es una cuestión de organización, sino de reconocer que hay tiempos establecidos para diferentes actividades en la vida.
Hay momentos para trabajar, descansar, disfrutar, y también para esperar.
Dios ha diseñado un orden y propósito para todas las cosas, y al vivir en armonía con esos tiempos, podemos aprovechar al máximo nuestras vidas.
Las organizaciones de las actividades en el tiempo deben ir acorde con las metas que nos hemos trazado.
Por ejemplo, aprender un nuevo idioma, es necesario dedicar tiempo para que sea una realidad. Y así con cada meta propuesta debemos sabiamente apartar tiempo.
- Salmo 90:12
Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.
Aquí el salmista pide a Dios que le ayude a ser sabio en el uso del tiempo.
Este versículo nos muestra que el tiempo es un recurso limitado y que es necesario administrarlo con sabiduría.
Contar nuestros días implica ser conscientes de la brecha entre el tiempo que tenemos y la eternidad.
Al reconocer nuestra fragilidad y la brevedad de la vida, aprendemos a priorizar lo que realmente importa y a vivir con propósito.
- Efesios 5:15-16
Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios, sino como sabios; aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
La palabra nos exhorta a vivir con sabiduría y aprovechar bien el tiempo.
No se trata solo de una cuestión de gestión del tiempo, sino de cómo utilizarlo para vivir de acuerdo con los propósitos de Dios.
Aprovechar bien el tiempo, significa que las acciones que desarrollemos nos acercan a las metas propuestas, es decir que nos ayudan a construir en cada área, pero en ocasiones nos comportamos como necios, utilizando el tiempo para destruir o alejarnos de las metas propuestas.
A propósito de este tema, cada día debemos apartar tiempo para hacer lo que dice en
Mateo 6:6
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará en público.
Lo anterior no se puede remplazar o posponer para el futuro, es decir que cada día debe estar incluido en nuestras actividades del día, porque este tiempo nos ayudara a cumplir las metas que nos hemos propuesto.