vamos a meditar en un pasaje que nos muestra el poder de la gracia de Dios en la vida de una persona, lo encontramos en:
1 Timoteo 1:12-14:
Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor, porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio,
habiendo yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador; mas fui recibido a misericordia porque lo hice por ignorancia, en incredulidad.
Pero la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y el amor que es en Cristo Jesús
En estos versículos, el apóstol Pablo expresa su profunda gratitud por la gracia transformadora de Dios.
Pablo, antes conocido como Saulo de Tarso, era un perseguidor de las personas que decían que Jesús era el Cristo.
Sin embargo, Jesucristo lo llamo cuando iba camino a Damasco y trasformo su vida .
La gracia de Dios lo transformó y lo llamó al servicio del ministerio.
En Hechos 9, vemos cómo Pablo, que estaba decidido a apresar a las personas que decían que Jesús era el Cristo , tuvo un encuentro directo con Jesucristo el Señor, el cual le dio una tarea a realizar ,como lo leemos en:
Hechos 9:15
El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel.
La gracia de Dios tiene el poder de transformar cualquier vida, sin importar cuán lejos nos hayamos desviado.
Como Pablo, todos podemos ser transformados y usados para los propósitos de Dios por Su gracia.
Pablo reconoce que, antes de conocer a Cristo, actuaba en ignorancia e incredulidad.
A pesar de sus acciones blasfemas y persecutorias, Dios lo llamo para correr su palabra.
Mañana Dios mediante continuamos con este tema, dale me gusta y comparte.
Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13:13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor