Primero vamos la definición de obsoleta que encontramos en el diccionario:
se refiere a algo que ha quedado en desuso o ha perdido su utilidad debido a que ha sido reemplazado por algo más nuevo, moderno o eficiente.
Puede aplicarse a objetos, tecnologías, métodos, o ideas que ya no son relevantes o funcionales en el contexto actual.
Por ejemplo, una tecnología como el disquete es obsoleta , porque ha sido sustituida por el almacenamiento en la nube.
Teniendo en mente la definición, encontramos en la sociedad un mensaje peligroso :
”la palabra de Dios es obsoleta”
y presentan alternativas que supuestamente la remplaza.
La Palabra de Dios no es simplemente un texto escrito o un mensaje ordinario;
es viva, poderosa , transformadora y permanece en el tiempo sin cambios ,porque es el único fundamento para la vida.
La palabra obra en nuestras vidas de manera profunda, moldeando nuestro carácter y fortaleciéndonos en nuestro caminar.
En Hebreos 4:12 dice:
12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
Esto significa que la Palabra de Dios tiene la capacidad de penetrar profundamente en nuestro ser, discerniendo nuestras intenciones y pensamientos, nos da consuelo en tiempos de dolor, y dirección en momentos de incertidumbre.
Es Viva, La Palabra de Dios no es un libro muerto o anticuado.
Aunque fue escrita hace miles de años, sigue siendo relevante y dinámica en la vida de los creyentes hoy.
Es Eficaz: Es capaz de producir el efecto deseado en nuestras vidas. No regresa vacía, sino que cumple el propósito de Dios ,como dice en Isaías 55:11
La Palabra de Dios confronta nuestras acciones y pensamientos.
Al leerla, nos muestra aquellas áreas de nuestra vida que necesitan cambio.
Y Nos lleva a alinearnos con la voluntad de Dios.
La Palabra de Dios renueva nuestra manera de pensar y de ver la vida.
La fe de un creyente no se basa en experiencias o emociones, sino en la verdad de la Palabra de Dios, como dice en:
Romanos 10:17Así que la
fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Cuando leemos, escuchamos y meditamos en la Palabra, nuestra fe se fortalece.
La palabra de Dios no es obsoleta.
La palabra de Dios permanece vigente y es verdad de generación en generación.
Mañana Dios mediante continuaremos con este tema
Deja abajo en los comentarios que temas deseas que tratemos en este espacio.
Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13: 13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor”