en Filipenses 2:14-15. Estos versículos nos exhortan a vivir de una manera que refleje nuestra identidad como hijos de Dios,
Vamos a leerlo
Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, e n medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo.
La palabra nos exhorta a
“hacer todo sin murmuraciones y contiendas”.
Esto es un llamado a mantener una actitud de gratitud y paz en todas nuestras acciones.
Las murmuraciones y contiendas son actitudes que destruyen la unidad y la armonía en cualquier entorno social.
La palabra nos dice que debemos:
“resplandecer como luminares en el mundo”.
Jesús también hizo esta referencia en Mateo 5:14-16.
Reflexionemos sobre nuestras propias actitudes y comportamientos.
¿Estamos libres de murmuraciones y contiendas?
Pidamos a Dios que nos ayude a identificar y corregir cualquier área en la que necesitemos crecer, para que nuestra vida sea un testimonio claro de su amor y poder.
Oramos al Señor para que nos ayude a vivir como sus hijos amados, siendo un testimonio vivo de su gracia y verdad.
Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13: 13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor”