OCASIÓN DE CAER

DIOS

Mateo 18:1-4
1En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?
Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos,
y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos.

Daniel 4:34
34 Mas al fin del tiempo yo Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades.

Daniel 4:37
37 Ahora yo Nabucodonosor alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas, y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia.

 Juan 15:5
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos;
el que permanece en mí, y yo en él,
éste lleva mucho fruto;
porque separados de mí nada podéis hacer.

 1 Corintios 3:5-7
¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos?
Servidores por
medio de los cuales habéis creído;
y eso según lo que a cada uno concedió el Señor.
Yo planté, Apolos regó; 
pero el crecimiento lo ha dado Dios.
Así que ni el que planta es algo,
ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.

 1 Corintios 3:8
Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa
conforme a su labor.

Mateo 18:6-9
Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno,
 y que se le hundiese en lo profundo del mar.
!!Ay del mundo por los tropiezos! porque es necesario que vengan tropiezos, pero !!ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo!
Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno.
Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.

Romanos 8:6
Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz.

2 Corintios 3:18
18 Por tanto, nosotros todos,
 mirando a cara descubierta como en un
espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen,
como por el Espíritu del Señor.

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