la palabra de Dios tiene promesas para todas las áreas nuestra vida, en ocasiones parece imposible disfrutar de ellas y sin darnos cuenta poco a poco las dejamos a un lado, pero Dios nos llamó a perseverar en su palabra para disfrutar de sus promesas, porque su palabra se cumple y Dios no miente.
Jesús en la parábola del sembrador nos exhorta a perseverar en la palabra, la encontramos en:
Lucas 8:15
5 Mas la que cayó en buena tierra, estos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y dan fruto con perseverancia.
Muchas veces esperamos resultados inmediatos, pero es necesario perseverar en ser hacedores de la palabra.
Por ejemplo:
1 Tesalonicenses 5:17 Orad sin cesar.
La oración es fundamental en nuestra relación personal con Dios.
Debemos orar en todo momento, no debemos caer en el error de hacerlo solo en los momentos difíciles
La palabra nos exhorta a ser diligentes para prosperar en todas las áreas de la vida, vamos a:
Proverbios 22:29
¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará; no estará delante de los de baja condición.
La diligencia trae consigo oportunidades y el favor de Dios.
Aunque a veces los resultados no son inmediatos, Dios no es indiferente a nuestro esfuerzo constante.
La prosperidad y el favor vienen a aquellos que perseveran, no solo en el trabajo natural, sino también en ser hacedores de la palabra de Dios, independiente de los resultados, porque en el tiempo cosecharemos sino desmayamos.
Debemos animarnos unos a otros a perseverar en la palabra, esto es por fe, porque el milagro sucede.
Deja en los comentarios qué temas te gustaría que tratemos en este espacio.
Para finalizar, tengamos presente lo que nos dice
1 Corintios 13:13
Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.”