La misericordia de Dios es uno de los atributos de Su carácter.
Dios se inclina con compasión hacia nuestras debilidades, vamos a:
Lamentaciones 3:22-23
Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.
Cada mañana, sin excepción, recibimos nuevas las misericordias de Dios
No importa cómo fue el ayer: si fue un día de victoria o de tropiezos, Dios no nos trata conforme a nuestros errores, sino que cada día ofrece una nueva oportunidad para comenzar de nuevo.
Cuando abrimos los ojos por la mañana, es por su misericordia.
Dios no nos abandona a nuestra suerte, ni nos deja solos en nuestros errores.
Su misericordia también se expresa en la corrección con amor, que nos ofrece para enderezar nuestro camino, como lo dice en:
Hebreos 12:6
Porque el Señor al que ama, disciplina…
Esto también lo encontramos en
Proverbios 3:11-12
No menosprecies, hijo mío, el castigo de Jehová, ni te fatigues de su corrección; porque Jehová al que ama castiga, como el padre al hijo a quien quiere.
Cuando sentimos una convicción interna de que hicimos mal, es el Espíritu Santo, en su misericordia, hablándonos.
Cuando una puerta se cierra, muchas veces es para protegernos de algo peor.
Cuando pasamos por pruebas, Dios está obrando en nuestro carácter con amor, su palabra dice “para los que aman a Dios todo obra para bien”
Dios usa a otras personas para manifestar su misericordia: por medio de una palabra en el momento adecuado, una ayuda inesperada, un abrazo oportuno.
La misericordia de Dios no solo es algo que recibimos, sino que también estamos llamados a compartirla con los demás.
Como dice en:
Lucas 6:36
36 Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
Oramos para no ser tan solo oidores sino ser hacedores de la palabra de Dios
Dios permanece Fiel y cada mañana es nueva su misericordia
Para finalizar vamos a
Mateo 6:6
Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo secreto, te recompensará en público.