Proverbios 16:18
18 Antes del quebrantamiento es la soberbia,
Y antes de la caída la altivez de espíritu.
La arrogancia es el sentimiento de superioridad que desarrolla un individuo en relación con los otros; la persona arrogante es altanera, presuntuosa, prepotente o soberbia. Por lo que la persona arrogante no reconoce la necesidad de Dios en su vida.
La arrogancia no permite disfrutar del reino de Dios aquí en la tierra.
Vamos a leer Dios que dice sobre la arrogancia:
13 El temor de Jehová es aborrecer el mal;
La soberbia y la arrogancia, el mal camino,
Y la boca perversa, aborrezco.
Dios aborrece la arrogancia.
En el libro de Hechos encontramos un ejemplo de arrogancia:
Hechos 12:20-23
20 Y Herodes estaba enojado contra los de Tiro y de Sidón; pero ellos vinieron de acuerdo ante él, y sobornado Blasto, que era camarero mayor del rey, pedían paz, porque su territorio era abastecido por el del rey.
21 Y un día señalado, Herodes, vestido de ropas reales, se sentó en el tribunal y les arengó.
22 Y el pueblo aclamaba gritando: !!Voz de Dios, y no de hombre!
23 Al momento un ángel del Señor le hirió, por cuanto no dio la gloria a Dios; y expiró comido de gusanos.
Herodes al ser engrandecido por el pueblo actuó con arrogancia, no reconoció a Dios y no le dio la gloria.
En éxodo también encontramos un ejemplo de arrogancia:
Éxodo 5:2
Y faraón respondió: ¿Quién es Jehová, para que yo oiga su voz y deje ir a Israel? Yo no conozco a Jehová, ni tampoco dejaré ir a Israel.
En el libro del profeta Daniel encontramos al rey Nabucodonosor, leamos:
Daniel 3:15
15 Ahora, pues, ¿estáis dispuestos para que al oír el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua que he hecho? Porque si no la adorareis, en la misma hora seréis echados en medio de un horno de fuego ardiendo; ¿y qué dios será aquel que os libre de mis manos?
La soberbia llevo al rey Nabucodonosor a pensar que no había nadie superior a él.
La soberbia nubla el entendimiento y nos hace pensar que no necesitamos una relación personal con Dios.
Pero oramos para que Dios alumbre nuestro entendimiento para ver que somos necesitados de Dios para hacer de la oración y la lectura de la palabra un habito diario.
Para finalizar Recordemos
Proverbios 28:25
Más el que confía en el Señor prosperará.
Un comentario en «ARROGANCIA»
Super interesante el post!!!