En la biblia encontramos muchas historias del poder de Dios sobre la enfermedad; sin importar que tan grave fuera, su poder se manifiesta para restaurar el cuerpo.
Por ejemplo, la mujer que había gastado todo lo que tenia y continuaba enferma, vamos a:
Lucas 8:43-48
43 Pero una mujer que padecía de flujo de sangre desde hacía doce años, y que había gastado en médicos todo cuanto tenía, y por ninguno había podido ser curada,
44 se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto; y al instante se detuvo el flujo de su sangre.
45 Entonces Jesús dijo: ¿Quién es el que me ha tocado? Y negando todos, dijo Pedro y los que con él estaban: Maestro, la multitud te aprieta y oprime, y dices: ¿Quién es el que me ha tocado?
46 Pero Jesús dijo: Alguien me ha tocado; porque yo he conocido que ha salido poder de mí.
47 Entonces, cuando la mujer vio que no había quedado oculta, vino temblando, y postrándose a sus pies, le declaró delante de todo el pueblo por qué causa le había tocado, y cómo al instante había sido sanada.
48 Y él le dijo: Hija, tu fe te ha salvado; ve en paz.
No hay nada imposible para Dios, su poder la sano.
Ahora vamos a:
Mateo 8:14-17
14 Vino Jesús a casa de Pedro, y vio a la suegra de éste postrada en cama, con fiebre.
15 Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.
16…y sanó a todos los enfermos;
17 para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.
La palabra dice que el llevo nuestras enfermedades y por su llaga hemos sido curados.
La oración del justo puede mucho, por lo que debemos orar sin importar el diagnóstico médico, recordemos que el poder Dios nada lo limita.
Santiago 5:15
15 La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará.
Nosotros debemos hacer nuestra parte, que es orar con fe, sin dudar y veremos el poder de Dios sobre la enfermedad. Recordemos; en su cuerpo se llevó las enfermedades y por su llaga hemos sido curados.
Para finalizar recordemos lo que dice en:
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.