En la biblia, Dios es comparado con un escudo en varias ocasiones, lo que simboliza defensa, seguridad y refugio frente a las adversidades.
En la vida se presenta dificultades o momentos de incertidumbre. Sin embargo, este versículo nos recuerda que no estamos desamparados.
Así como un escudo protege al guerrero en medio de la batalla, Dios es nuestra protección frente a las pruebas y las situaciones que enfrentamos en el día a día.
En nuestro caminar diario, enfrentamos situaciones que nos llenan de temor, incertidumbre o dolor.
En esos momentos, este versículo nos dice que estamos protegidos, como un soldado con su escudo en medio de una batalla.
También es un llamado a esperar en Dios.
Porque queremos respuestas inmediatas o soluciones rápidas a nuestras dificultades, pero confiar en Dios, implica también esperar con paciencia.
Dios es como un escudo, Nos protege y nos sostiene en medio de las tormentas de la vida.
Por tanto, no temamos, sino que confiemos, que bajo Su protección estamos seguros, y que aquellos que en Él esperan jamás serán
Avergonzados
El rey David fue un guerrero, que conocía las bondades del escudo en la batalla, por esta razón al hablar de la protección de Dios usa este símbolo, veamos 3 versículos sobre este simbolismo:
1.-Salmos 119:114
Mi escondedero y mi escudo eres tú;
En tu palabra he esperado.
2.-Salmos 18:30
Y acrisolada la palabra del Señor;
Escudo es a todos los que en él esperan.
3.-Salmos 3:3
Mas tú, Dios, eres escudo alrededor de mí;
Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.
Oramos para avanzar seguros de la protección de Dios en nuestras vidas
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Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13:13
“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor”