EL VALOR DE LA SABIDURÍA Y EL ENTENDIMIENTO

En Proverbios 19:8 dice

El que posee entendimiento ama su alma; el que guarda la inteligencia hallará el bien.

Este versículo nos muestra que buscar la sabiduría es un acto de amor hacia nosotros mismos y que la inteligencia trae consigo bendiciones y bienestar.

En un mundo donde la información es abundante, pero la verdadera sabiduría es escasa, este versículo nos guía hacia un camino de vida plena que solo brinda Jesucristo el Señor.

 La cordura en este contexto se refiere a la sabiduría, prudencia y sensatez. Es la capacidad de tomar decisiones acertadas y vivir de acuerdo a principios rectos.

En Santiago 1:5 dice:

Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.

Pedir sabiduría es un acto de amor hacia nosotros mismos, porque nos protege de errores y consecuencias que nos destruyen.

En Proverbios 4:7 dice: Sabiduría, ante todo; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.

No solo debemos pedir sabiduría, sino también pedir poder aplicarla en nuestra vida diaria. 

 La inteligencia en este versículo se refiere a la capacidad de entender y aplicar el conocimiento de la palabra de Dios.

 No basta con conocer la verdad; debemos vivirla.

Aquellos que guardan la inteligencia experimentarán el bien. no solo de bendiciones materiales, sino también de bienestar físico y emocional.

En Proverbios 3:13-18 nos dice que la sabiduría es más valiosa que las riquezas y trae consigo una vida larga, paz y felicidad.

Un ejemplo es Salomón

 El rey Salomón es conocido por su gran sabiduría. Cuando Dios le ofreció cualquier cosa que él deseara, Salomón pidió sabiduría para gobernar a su pueblo. Dios le concedió no solo sabiduría, sino también riquezas y honor, lo podemos leer en 1 Reyes 3:5-14 

¿Cómo podemos aplicar Proverbios 19:8 en nuestra vida diaria?

  1. Buscar Sabiduría de Dios:

   – Como Santiago 1:5 nos exhorta, pidamos sabiduría a Dios en oración. Leamos la Palabra y pidamos que Dios la revele y alumbre nuestro entendimiento para comprenderla y aplicarla. 

  1. Vivir con Prudencia:

 Tomemos decisiones sabias basadas en la palabra de Dios. Evaluemos nuestras acciones y consideremos sus consecuencias. 

  1. Aplicar el Conocimiento:

 No solo se trata de conocer la verdad, sino de vivirla. oramos para ser hacedores de la palabra y no caer en el engaño de ser solo oidores.

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Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en

1 de Corintios 13:13

Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor.  Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor

 

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