Salmos 92:10
Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo;
Veamos algunas características del Búfalo:
En el sur oeste asiático el búfalo es conocido como
“el tractor de oriente” debido a la utilización de su
fuerza para el trabajo pesado en las tierras.
Un búfalo puede llevar cargas hasta un poco más de 2,866 libras, sin duda tiene una fuerza tremenda.
¡Es decir que este animal tiene la capacidad de cargar casi 30 sacos de 100 Lbs de café en grano ósea que no necesitamos una pick up!! Es impresionante la capacidad del Búfalo y no digamos su estructura puede llegar a pesar más de 1200 kg, la verdad que algo increíble.
A pesar de su tamaño monstruoso, de su fuerza y potencia aplastante, este animal es capaz de correr hasta 60 kilómetros por hora, y por si eso fuera poco, en la base, los cuernos son muy anchos y lisos, casi se encuentran en el centro de la frente y forman un casco duro, que las balas no pueden perforar”
Cuando nos enfrentamos a situaciones adversas, Dios nos fortalece y nos permite avanzar, Dios aumenta nuestras fuerzas como las del Búfalo.
Ahora vamos a las debilidades, flaquezas,
y el engaño de la carne:
2 corintios 12: 9 -10
9 Y me ha dicho: Bástate mi gracia;
porque mi poder se perfecciona en la debilidad.
Por tanto, de buena gana me gloriaré
más bien en mis debilidades,
para que repose sobre mí el poder de Cristo.
10 Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades,
en persecuciones, en angustias;
porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
En el libro de Joel encontramos,
“diga el débil fuerte soy”
La única manera de soportar todas las situaciones adversas, es siendo fortalecidos por Dios.
Dios nos llamó a permanecer fuertes por su poder, recordemos que “Dios nos hizo aptos para disfrutar del reino de Dios aquí en la tierra”, nos predestino.
Nosotros venimos predestinados, bautizados, circuncidados, es decir, limpios, santos, y revestidos
de Cristo, pero es necesario apartar cada día tiempo para leer la palabra y orar.
Vamos a 2 Timoteo 1:7
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
No tenemos espíritu de cobardía,
Dios nos equipó con su poder, amor y dominio propio.
Oramos para que Dios alumbre nuestro entendimiento para ver claramente el evangelio, el cual nos hace libres.
Para finalizar recordemos lo que dice en:
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.