Hebreos 2:18
Pues en cuanto él mismo padeció
siendo tentado, es poderoso para socorrer
a los que son tentados.
Cristo el Señor vino y participo de carne y sangre,
es decir, que tomo cuerpo en Jesús.
Consultemos la palabra en
Lucas 2.10-12
Pero el ángel les dijo: No temáis;
porque he aquí os doy nuevas de gran gozo,
que será para todo el pueblo:
que os ha nacido hoy, en la ciudad de David,
un Salvador, quees Cristo el Señor.
Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño
envuelto en pañales, acostado en un pesebre.
Dios mismo vino y tomo cuerpo para vencer;
vamos a hebreos 4:15
Él fue tentado tal como somos tentados nosotros, con la única diferencia de que él
nunca cometió pecado.
Nosotros somos tentados cada día,
por eso debemos tener una fuerte
relación con Dios, él es la clave para caminar en victoria. Dios no nos juzga, ni nos condena.
Todo lo contrario, Dios nos socorre,
porque Dios es nuestro ayudador cada día.
Recordemos lo que dice hebreos 4:6
Entonces, acerquémonos con confianza
al trono de Dios que es generoso.
Allí recibiremos su gracia y su bondad para ayudarnos cuando lo necesitemos.
Al fortalecer nuestra relación con Dios
podemos decir confiadamente Dios es mi ayudador.
Para finalizar recordemos lo que dice
Efesios 3:20
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas
las cosas mucho más abundantemente
de lo que pedimos o entendemos,
según el poder que actúa en nosotros.