Jesús dijo:
Juan 8:32
32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Entonces empezamos a preguntarnos, pero ¿la verdad de que nos hará libres? O
¿acaso somos esclavos?
En lo físico no somos esclavos, pero algunos dirán somos esclavos del sistema económico o político; Sin embargo, Jesús no se refería a nada de lo anterior, vamos a:
Juan 8:34
34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.
Esclavos del pecado se refiere a las obras de la carne, a los deseos engañosos que no permiten que disfrutemos del reino de Dios aquí en la tierra, están identificados en:
Gálatas 5:19-21
19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,
20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,
21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
No es por nuestro esfuerzo o capacidad someter estos deseos engañosos, la única forma de ser libres es conociendo la verdad.
Debemos ser humildes y reconocer que necesitamos de la palabra de Dios; Oramos para cada día avanzar a la meta del varón perfecto a reinar en vida por medio de Jesucristo el Señor.
Para finalizar recordemos lo que dice en:
Mateo 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.