1 Tesalonicenses 5:16
Estad siempre gozosos.
Vamos a la siguiente historia para ilustrar una
vida llena del gozo de Dios.
Un zar estaba enfermo y dijo: – Daré la mitad de mi reino a quien me cure. Entonces, se reunieron todos los sabios y empezaron a discutir cómo curar al zar.
Nadie sabía que hacer.
Sólo un sabio afirmó que se podía curar al zar. – Si se encuentra a un hombre que experimente gozo -dijo-, se le quita la camisa y se le pone al zar, éste se curará.
El zar mandó que buscaran a un hombre gozoso por todo su reino, pero por mucho que sus emisarios cabalgaron por todos sus territorios, no pudieron encontrarlo.
No había ni uno que estuviese satisfecho de todo.
Uno era rico, pero estaba enfermo y se quejaba ; otro gozaba de buena salud, pero era pobre y esto lo hacía poner triste ; otro era rico y gozaba de buena salud, pero su mujer era malvada, o bien sus hijos por esto renegaba ; todos tenían algún motivo de queja.
Un día, a última hora de la tarde, el hijo del zar pasaba junto a una pequeña isba y oyó a alguien que decía: – Gracias a Dios he trabajado bastante, he comido cuanto necesitaba y ahora me voy a la cama. ¿Qué más puedo pedir?
El hijo del zar se alegró, ordeno que le quitasen la camisa a ese hombre, que le diesen una cantidad de dinero a modo de compensación, todo el que quisiera, y que llevaran la camisa al zar.
Los emisarios fueron a ver al hombre que tenia gozo en su vida y quisieron quitarle la camisa; pero ese hombre era tan pobre que ni siquiera tenía camisa.
Ahora vamos a la palabra, El gozo no es generado por las situaciones, circunstancias o razones externas. El gozo es un fruto del Espíritu generado por la presencia de Dios que mora en nuestro interior.
Jesús dijo en Juan 4:13-14
Cualquiera que bebiere de esta agua,
volverá a tener sed;mas el que bebiere del agua
que yo le daré, no tendrá sed jamás;
sino que el agua que yo le daré será en él una
fuente de agua que salte para vida eterna.
Oramos para disfrutar del fruto del gozo en medio de las diferentes situaciones que se presentan,
como dice la palabra “sed agradecidos”.
Para finalizar vamos a 1 Juan 5:14-15
Y esta es la confianza que tenemos en él,
que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos
oye en cualquiera cosa que pidamos,
sabemos que tenemos las peticiones
que le hayamos hecho