TALENTOS Y DONES

Dios nos ha dado dones y talentos para desarrollar
para el progreso y bienestar de la sociedad.

Desarrollar los talentos y dones requiere disciplina, tiempo de práctica y persistencia.

También conocimiento que le permita marcar
 la diferencia en el medio donde se desempeña.

Vamos a la siguiente historia:

Había una vez un ingeniero con mucha
experiencia a sus espaldas que fue llamado
para arreglar una máquina extremadamente
 compleja que no funcionaba bien.
 La empresa poseedora de la máquina había
probado sin éxito solucionarlo con varios técnicos.

El ingeniero, tras revisar detenidamente la máquina, procedió a sacar un destornillador y apretó con
un par de vueltas más un minúsculo tornillo.
Tras eso, la máquina volvió a funcionar a la perfección.

El presidente de la compañía se mostró encantado
 y se ofreció a pagar la factura en el acto.
 Sin embargo, se sobresaltó al oír al ingeniero que el precio de la factura ascendía a 1.000 dólares.

 «¡¿Está usted loco?!
¿1.000 dólares por apretar un simple tornillo?»,

Gritó enfurecido el empresario, para proceder a solicitar una factura perfectamente detallada.

La factura detallada fue la siguiente:

Servicios prestados:
– Apretar un tornillo: 1 dólar
– Saber qué tornillo apretar: 999 Dólares
– Total: 1.000 Dólares

Hay una parábola sobre lo talentos y dones que
a cada uno nos fue dado de acuerdo a la capacidad, vamos a Mateo 25:15    
Y a uno le dio cinco talentos, a otro dos, y a otro uno,
 a cada uno conforme a su capacidad;

No debemos estar mirando los talentos y dones
de las demás personas, el camino es enfocarnos en nuestros talentos y dones para desarrollarlos con dedicación, esfuerzo y persistencia.

Continuemos en Mateo 25:24-25
24 Pero llegando también el que había recibido
 un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste
y recoges donde no esparciste;
25 por lo cual tuve miedo, y fui y escondí
tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.

Dios dice que debemos esforzarnos y ser valientes porque su presencia esta en nosotros,
Él no nos dejara ni abandonara.
Nuestra responsabilidad es desarrollar los talentos y dones por medio de estudio, dedicación,
 disciplina y persistencia para darlo a la sociedad generando bienestar y prosperidad.

 Para finalizar recordemos lo que dice en
Efesios 3:20
20 Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros.

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