En un mundo lleno de cambios y desafíos,
la verdad eterna del amor divino es un ancla
para nuestras almas.
1. La Fuente del Amor Divino en 1 Juan 4:7-8
En estos versículos, el apóstol Juan nos recuerda que Dios es amor. No simplemente que Él muestra amor, sino que Su esencia es amor.
Nuestro Creador nos ama de una manera que va más allá de nuestra comprensión.
2. El Amor Demostrado en la Cruz,
está en Romanos 5:8
Nada ejemplifica el amor de Dios más claramente que el sacrificio de Jesús en la cruz. Dios demostró su amor al tomar cuerpo y morir por nosotros.
3. Amor Incondicional y Perdón:
lo encontramos en Efesios 2:4-5
El amor de Dios no se basa en nuestras
acciones o méritos.
Su amor es incondicional.
Consideremos cómo este amor transformador nos ha dado vida en Cristo.
4. El Llamado a Amar:
que está en Juan 13:34-35.
Dios no solo nos ama, sino que también nos llama
a amarnos mutuamente.
Meditemos en la importancia de reflejar el amor divino en nuestras relaciones diarias, siendo testigos del amor de Dios a través de nuestras acciones y actitudes hacia los demás.
El amor de Dios es como un refrigerante
en el diario vivir.
Oremos para Que el amor de Dios sea el motor de nuestras vidas. Amén.
Para finalizar debemos tener en cuenta lo que dice en
1 de Corintios 13:13
Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor. Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor