LA SOBERANIA INMUTABLE DE DIOS

En diversos versículos nos hablan de la soberanía de Dios, es decir su dominio absoluto sobre toda la creación.

En medio de los desafíos y las incertidumbres de la vida, la soberanía de Dios es un fundamento inquebrantable.

En el libro de Génesis, encontramos el relato de la creación, donde se destaca el poder creativo de Dios, vamos a

 Génesis 1:1 dice “En el principio, Dios creó los cielos y la tierra”.

Pero, esto también lo encontramos en:

Hebreos 11:3

Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.

Estos dos versículos nos recuerdan que Dios es el arquitecto supremo de todo lo que existe.

Su poder creativo establece la base de su soberanía, mostrándonos que el universo está bajo su control desde el principio de los tiempos.

A lo largo de la historia bíblica, vemos cómo Dios cumple sus propósitos. En el relato del Éxodo, por ejemplo, vemos la manifestación del Poder y Soberanía de Dios al liberar a su pueblo de la esclavitud en Egipto.

Éxodo 14:14 dice: “El Señor peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos”.

.  Este versículo ilustra la soberanía de Dios al intervenir de manera poderosa para cumplir sus promesas y liberar a su pueblo.

Jesús expreso la soberanía de la siguiente manera en: 

Mateo 10:29-30

29 ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre.

 30 Pues aun vuestros cabellos están todos contados.

 31 Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos. 

En algo aparentemente insignificante como es el número de los cabellos de cada persona, Jesús expresa que están bajo la Soberanía de Dios y en el versículo 31 nos dice: no temáis

Oramos Para que el Señor nos revele, que su Soberanía esta sobre su creación, para darnos tranquilidad y seguridad en medio de las diferentes situaciones o incertidumbre.

 Y la palabra nos dice que hay un solo Soberano:

1 Timoteo 6:15

15 la cual a su tiempo mostrará el bienaventurado y solo Soberano, Rey de reyes, y Señor de señores,

En momentos de adversidad, la palabra nos recuerda que el poder de Dios no se ve limitado por las circunstancias,  por ejemplo, en:

Romanos 8:28 nos asegura: “Y sabemos que en todas las cosas interviene Dios para bien de quienes lo aman, de quienes han sido llamados según su propósito”.

 Este versículo nos revela que la soberanía de Dios opera incluso en medio de las dificultades, transformando las pruebas en oportunidades para manifestar su poder ilimitado.

Al meditar en estos versículos, encontramos consuelo y confianza en el hecho de que el Dios soberano está en control, guiando nuestra vida con amor y propósito eterno, esto es por fe.

Para finalizar, debemos tener presente lo que dice en

1 de Corintios 13:13

“Y ahora permanece la fe, la esperanza y el amor.  Estos tres, pero el mayor de ellos es el Amor”

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *